Estos jeans son favorecedores, y aptos para todo tipo de cuerpos. Altos, anchos y con un largo entre la rodilla y el tobillo. Los puedes llevar con zapatos chatos, altos o zapatillas.
Son excelentes para dar un toque informal a tu vestimenta sin perder elegancia. Atrévete a probarlos para salir de dudas. La idea es que te queden un poco holgados, no excesivamente grandes. Puedes ocultar muchas zonas conflictivas con ellos.
Están de moda y todas podremos llevarlos. Si has pasado los cincuenta años, es recomendable utilizar jeans de cortes clásicos, pero la buena noticia es que estos están absolutamente permitidos. Combínalos con botitas o zapatos clásicos y dale un toque actual a tu vestimenta.
No olvides que el quid de tu vestimenta es que sea original y cómoda y que configure tu estilo personal. Siempre puedes anexar accesorios de moda que lo complementen.
En la próxima veremos los excesos que no podemos permitirnos.