Miedo

Miedo

Me niego a someterme al miedo

que me despoja de la alegría de mi libertad,

que no me deja correr ningún riesgo,

que me torna pequeño y mezquino,

que me ata,

que no me deja ser directo y franco,

que me atormenta,

que ocupa negativamente mi imaginación,

que siempre pinta visiones sombrías.

Sin embargo, no quiero levantar trincheras por miedo al miedo.

Yo quiero vivir y no quiero encerrarme.

No quiero ser amigable por miedo de ser sincero.

Quiero pisar con firmeza porque estoy seguro

y no para cubrir mi miedo.

Y cuando me callo, quiero hacerlo por amor

y no por temor a las consecuencias de mis palabras.

No quiero creer en algo

sólo por el temor de no creer.

No quiero filosofar por el miedo a que algo pueda tocarme de cerca.

No quiero doblegarme solo porque tengo miedo de no ser amable.

No quiero imponer algo a los otros

por miedo a que puedan imponerme algo a mí.

Por miedo a cometer errores, no quiero tornarme inactivo.

No quiero huir hacia lo viejo, lo inaceptable

por temor a no sentirme seguro frente a lo nuevo.

No quiero dármelas de importante por miedo a ser ignorado.

Por convicción y amor,

quiero hacer lo que hago

y dejar de hacer lo que dejo de hacer.

Quiero arrancar el dominio al miedo

y dárselo al amor.

Y quiero creer en el reino

que existe en mí.                                                                                                   

Rudolf Steiner (1861-1925)